LA MITOLOGÍA Y LA BIBLIA
PREÁMBULO
por Corinne Heline
La verdad, como un hilo de oro, relaciona todas las religiones que han existido sobre la tierra, formando con ellas un rosario de cristal que brilla con la blanca luz del Cristo Cósmico.
Todas las religiones han tenido una enseñanza externa y otra interna: Como San Pablo lo expresó, leche para los niños y carne para los hombres fuertes. Los mitos y leyendas de los distintos pueblos han contenido siempre grandes verdades espirituales, reveladas de formas especiales, para obtener el mayor bien, tanto para la raza como para el individuo.
Aquellos que estaban preparados para recibir el sentido profundo en ellos contenido, fueron introducidos en el santuario interno para proporcionarles enseñanzas más avanzadas y más profundas. Los que se contentaban con su interpretación literal, permanecieron en el atrio exterior y constituyeron la mayor parte de los devotos exotéricos.
Hablando de estos temas un folclorista moderno ha dicho que " Hay dos palabras en la lengua griega que tienen, tras ellas, una larga e interesante historia: Son las palabras "mitos" y "logos". Originariamente ambas tenían la misma fuerza en el lenguaje corriente y por eso, en tiempos de Homero, se empleaban indistintamente, tomando una o la otra, siempre con el significado que la voz "palabra" tiene en nuestro idioma. Logos, sin embargo, creció hasta significar, tanto la constitución interna como la forma externa del pensamiento y, consecuentemente, se convirtió en la expresión del pensamiento exacto que responde a principios universales e inmutables, alcanzando su más elevada significación al representar, no sólo la razón en el hombre, sino la razón en el universo, el divino Logos... "Mitos" significó todo lo completado por la boca del hombre... una palabra, un relato de algo, una historia... En la Grecia ática "mitos" significó una historia de los griegos prehistóricos... de ser un mito de Grecia ha pasado a ser un mito de cualquier tribu de cualquier pueblo de la tierra... Es antiquísima la razón por la cual los mitos han pasado a ser para el hombre vulgar sinónimos de mentiras; aunque los verdaderos mitos - y hay muchos - son las más espléndidas y expresivas manifestaciones de verdades conocidas por el hombre... Un mito, cuando contiene un principio universal, lo expresa de forma especial, empleando los personajes y las circunstancias propias de un determinado pueblo, tiempo y lugar; y las personas de ese pueblo particular, relacionadas con y a las que ese tiempo y ese lugar les son queridos, reciben el mito con gran regocijo, y la verdad viaja así con él como el alma con el cuerpo".
Las religiones de los griegos clásicos eran religiones mistéricas. Muchas de las escuelas de misterios fueron fundadas por inspirados filósofos que eran capaces de penetrar en el alma del mito e impregnarla con su divina razón de modo que, en verdad, transmitían sustancia viviente de una generación de neófitos a otra. Tenemos un ejemplo de ello en el mito de Psique y Eros, elaborado místicamente. Como el Evangelio de Juan, este mito no fue compuesto como un relato biográfico, sino como un trabajo de arte consciente. Fue cuidadosamente costruído para enseñar profundas verdades filosóficas, al tiempo que purifica la imaginación que se hace así sensible a la luz espiritual.
A los efectos que nos hemos propuesto de relacionar los mitos griegos con la Biblia cristiana, contamos principalmente con las tradiciones homéricas, que se corresponden con la era salomónica palestina. "En general - escribe el Profesor Breasted - durante la Época de los Reyes, los bárbaros Reyes Pastores constituyeron estados civilizados con gobierno, escritura y literatura". Simultáneamente, en Palestina estaba teniendo lugar idéntico proceso bajo los Reyes hebreos. En la siguiente época histórica griega apareció el segundo "creador de Biblias", Hesíodo, al tiempo que los profetas proclamaban la justicia y el favor de Yavé entre los judíos e israelitas. Y, aún, la cautividad de Israel y Judá en Asiria y Caldea, se corresponde con la época pitagórica entre los griegos: Fue durante la cautividad cuando se compiló la Biblia hebrea con un contenido aproximado al que ha llegado hasta nosotros. La escuela platónica de Grecia se corresponde con los "siglos de silencio" de Palestina, durante los cuales aparecieron los extracanónicos Antiguos Testamentos apócrifos. A diferencia de los griegos, los redactores hebreos de las Escrituras prefirieron el anonimato, juntando sus escritos bajo títulos y nombres tradicionales. Y lo hicieron como un acto de sacrificio personal en las eras literarias. En Grecia, las recopilaciones homéricas hechas entre los años 1.000 y 700 a. C., fueron también anónimas, pero el anonimato de la hecha a partir del 700 a.C., no fue consciente sino accidental, por haber sido olvidados los diversos cantores que aportaron sus obras, al igual que ocurrió en Israel con los salmistas, cuyos nombres fueron olvidados también por las generaciones siguientes. No obstante, los israelitas nunca abandonaron la tradición del anonimato hasta mucho después de haberse concluído el canon ortodoxo, y todos los autores conocidos, son extracanónicos. La misma tradición del anonimato perdura en el Nuevo Testamento y ha sido frecuente fuente de confusión.
La recopilación homérica fue aceptada por los griegos como verdadera revelación de los dioses, cuyos pregoneros eran los poetas. Se meditaba sobre ella por el neófito de los Misterios, con el fin de que la luz que contenían se difundiese en su conciencia, del mismo modo que el cuerpo extrae la salud y la fortaleza de los alimentos que ingiere.
Debido a la "identidad de la Verdad" que es común a las religiones antiguas y a las modernas, los antiguos mitos conservan aún su mensaje espiritual. La mayor parte de nosotros buscamos inspiración en los viejos mitos griegos que, quizá entraron más que las leyendas hebreas en los Misterios de Cristo, mediante los que el neófito moderno, especialmente en Occidente, alcanza la Liberación.
Incluso para el neófito oriental resultan importantes los mitos griegos, porque los antiguos griegos eran aventureros, tanto mental como físicamente
y por ello sus mitos y los Misterios desarrollados en su entorno, están cargados muy frecuentemente de influencias orientales que los elementos más conservadores de la vida griega jamás hubieran sido capaces de crear
Los escritos atribuidos a Orfeo, de los que sólo nos han llegado sólo fragmentos, tienen un significado más profundo. Los libros órficos estaban, con relación a Homero y a Hesíodo, como la Kábala está con relación a los cánones ortodoxos del judaísmo. Es la literatura esotérica por excelencia y muestra clarísimamente la influencia de los descubrimientos orientales en los campos de la psicología y la metafísica, aunque no faltan elementos estrictamente científicos, incluso en el moderno sentido de la palabra. Orfeo mismo pertenece a la época de la mitología y los libros que se le atribuyen son el trabajo de muchas generaciones de autores iniciados que escribían en Su nombre, es decir, en el de su escuela. Posteriormente se identificó en Grecia a Orfeo con el dios Baco, el "inmigrante de la India", o sea, una especia de Krisna. Según algunas leyendas, un día Baco desapareció y, tras una ausencia de vente años vividos en el tenebroso reino de Hades - como unos pocos dicen - o en el proverbial "negro", por misterioso, Egipto, regresó con un "nuevo nombre", en nombre de Iniciado de Orfeo que, se asegura que proviene de las palabras fenicias "aour", que significa luz, y "rophae", que significa curación. El nombre de Orfeo, pues, se reveló como el título dado a los iniciados con cierto grado de desarrollo: "Aquellos que curan con la luz".
El carácter cosmopolita de los Misterios Órficos queda de manifiesto en la lista parcial de los "libros perdidos de Orfeo", entre los cuales se encuentran:
- Los Argonautas: Obras herméticas.
- La Demetriada: Cosmogonía, Madre de los dioses.
- Cánticos sagrados de Baco, y Teogonía.
- El Velo o Red de las almas: El arte de los Misterios y sus ritos.
- El Libro de las Mutaciones: Química y Alquimia.
- Las Coribantes: Misterios terrestres y terremotos.
- Anenoscopia: Ciencia de la atmósfera, Botánica Natural y Mágica, etc.
* * *
No hay comentarios:
Publicar un comentario